Un inmigrante ilegal cruza en parapente la valla de Melilla y logra escapar de la Guardia Civil

Un inmigrante ilegal ha entrado en Melilla en parapente sobrevolando la doble valla de diez metros de altura que separa la ciudad española de Marruecos, para posteriormente emprender su huida a la carrera. El hombre seguía este lunes en paradero desconocido.

Según ha confirmado un portavoz de la Delegación del Gobierno, se trata de «un inmigrante varón» que consiguió penetrar de forma ilegal en Melilla «por la zona de Mariguari» -al norte de la ciudad autónoma- utilizando un parapente, técnica que ya emplearon los milicianos de Hamás en su ataque a Israel el pasado sábado, en este caso con artilugios motorizados.

La citada fuente ha subrayado que «a pesar de la rápida actuación de las patrullas antiintrusión de la Guardia Civil», el inmigrante logró huir por la desembocadura del río de Oro. La entrada se produjo este viernes a las 19:46 horas y este lunes aún no había sido localizado.

Aunque se desconoce su nacionalidad, desde la Delegación remarcan que tiene apariencia magrebí. El varón, nada más superar la doble valla, abandonó el parapente junto a la alambrada, cruzó la carretera de circunvalación paralela a la valla y saltó un guardarraíl para perderse por la zona arbolada junto al río.

Es la segunda vez en menos de un año que un inmigrante emplea esta técnica de vuelo sin motor para acceder ilegalmente a la ciudad española del norte de África, aprovechando las montañas cercanas que les permiten toman aire y actuar de forma similar a un paracaídas. El anterior precedente tuvo lugar el 1 de diciembre de 2022.

16 marroquíes llegan en patera a Cádiz

Además, agentes de la Policía Nacional interceptaron este domingo en Puerto América (Cádiz) a 16 inmigrantes ilegales que viajaban en patera y que fueron asistidos por Salvamento Marítimo en alta mar. Todos ellos son varones de origen marroquí que iban a bordo de una embarcación neumática semirrígida.

Tras ser desembarcados en Puerto América a las 02:15 horas con la colaboración de Guardia Civil, Policía Portuaria y Cruz Roja, fueron trasladados en un autobús de la Policía Nacional hasta el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) de Crinavis, en San Roque (Cádiz).

Pese a que los marroquíes se encontraban en buen estado de salud, allí recibieron asistencia sociosanitaria de Cruz Roja antes de ser custodiados por agentes de la Policía Nacional. Posteriormente fueron reseñados por especialistas de la Brigada de Policía Científica para el cotejo de su identificación.

Durante su estancia en el CATE la Brigada de Extranjería y Fronteras incoará un expediente administrativo por infracción de la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social.